lunes, 28 de julio de 2014

Lest we forget.


Hace hoy 100 años comenzó la primera guerra mundial. Es el acontecimiento histórico sobre el que más he leído y siempre que lo hago, algo se remueve dentro de mí cuando imagino lo que sintieron las personas que allí estuvieron luchando. ¿Qué actitud podía tomar un joven que estaba fuera de su país, pasando hambre y frío en una trinchera llena de barro bajo el fuego de la artillería enemiga? ¿Qué sentimientos brotaban en el soldado voluntario de 18 años mientras escribía a sus familiares, rezaba unas oraciones y cargando su bayoneta para saltar a morir devorado por el fuego de una ametralladora?


¿De qué podía tener miedo un soldado que sobrevivió en la primera linea? ¿No es acaso maravilloso simplemente ver amanecer después de tal pesadilla? aunque por otro lado, ¿No debía ser horrible despertar cada día con aquellas imágenes en la cabeza? Abrazar a los suyos después de aquello debió de ser maravilloso, pero convivir con la neurosis de guerra y recordar aquellas momentos un autentico tormento.

A. H. Thomas en la primera guerra mundial.
En la batalla más trágica de la primera guarra mundial, la del Somme, lucharon cientos de miles de hombre entre ellos A. Hitler y J.R.R. Tolkien. También estuvo presente en aquella campaña el joven A. H. Thomas, uno de tantos jóvenes ingleses que fueron llamado a filas. Al Soldado A. H Thomas y se le concedió la cruz militar por salvar a unos compañeros heridos que estaban en la tierra de nadie durante el fuego de la artillería enemiga. Algo se remueve dentro de mí cuando trato de imaginar lo que pasó por su cabeza para hacerlo. Lo puedo imaginar llegando a su casa con el uniforme del ejercito británico y sus medallas en la solapa tras ganar la guerra. Trato de visualizarlo abrazando a los suyos y contemplando la mirada orgullosa y aliviada de sus familiares, amigos y vecinos: Tras la guerra fue un héroe en su pueblo.

Toda mi admiración para aquellos valientes anónimos que como A.H. Thomas combatieron en la gran guerra y salvaron las vidas de otros compañeros arriesgando la suya. Ellos nos demostraron  que se pueden elegir diferentes actitudes bajo cualquier circunstancia.

Las medallas concedidas a A.H. Thomas durante la primera guerra mundial. 



Lest we forget.

sábado, 19 de julio de 2014

Estamos apuntando muy bajo.

¿Realmente hemos llegado al extremo de mostrarnos satisfechos simplemente con que los políticos se bajen el sueldo y no metan la mano donde no deben? ¿Hemos llegado a tal punto que el que promete lo elemental se pueda convertir en un ídolo? ¿Tan mal estamos? ¿Ha ese punto hemos llegado ya? ¿Tan hundidos estamos que lo primordial de la persona encargada de dirigir el futuro del país es que no sea un corrupto? ¿A caso eso no se presupone? ¿No es triste que los políticos pongan todos sus sentidos en matizar su pasado, limpiar su nombre y ser populistas en vez de centrarse en mostrar medidas reales para crear un estado con mayor bienestar social? ¿Tan mal estamos que cualquier persona que sea honrada puede parecer un buen político? Estamos apuntando muy bajo.


Si alguien necesita bajarse el sueldo y prometer no ser corrupto para conseguir votantes ¿No sería como el defensa que para hacerse un hueco en el equipo le promete al entrenador que no va a marcarse ningún gol en propia puerta y además renuncia a las primas? ¿De verdad hemos llegado al punto critico en el que lo más atractivo es lo que creemos menos malo? ¿No sería como amar a tu pareja únicamente porque te promete no serte infiel?

¿Tan mal estamos para que un trabajo “cualificado” sin remuneración o becas indignas sean un lujo? ¿Tan poco nos están valorando? ¿Hemos llegado a normalizar que no nos puedan exigir casi nada porque apenas hay con lo que pagarnos? ¿Ha llegado el momento en el que las personas con talento son sustituidas por los que su mejor cualidad es ser los mejor alienados? ¿Estamos viviendo una época en que simplemente cumplir con tu trabajo es una cualidad sobresaliente? ¿Es más competitivo ser dócil que creativo? ¿Tener criterio y ser ambicioso es un defecto y no ser problemático una virtud hoy en día?


Sin duda, estamos apuntando muy bajo.

domingo, 13 de julio de 2014

Ya no le gustas

¿Estás pensando demasiado en las consecuencias antes de actuar con ella? ¿La mayor parte de tu energía esta canalizada hacia no perderla? ¿Intentas que todo fluya para que ella se sienta feliz contigo? ¿No eres capaz de decirle que no? ¿Crees que das mucho más de lo que recibes? ¿Te gustaría hablar de ciertos temas pero nunca te atreves porque sabes que se va a enfadar? ¿No puedes dejar de preguntarte que estas haciendo mal? etc, etc… ¿Te resulta familiar todo esto? En ese caso es posible que ya la hayas perdido, si es que algún día la tuviste.

Si todo ha dado un giro y ahora no eres capaz de enfadarte, si no te atreves a tomar la iniciativa por miedo a cometer errores, si en tu relación todo lo que haces es únicamente para agradarla y para mantener la llama viva, si estas siempre disponible, si la otra persona es tu prioridad absoluta, si cancelas tus planes cuando ella te llama, si miras sus ultimas conexiones a whats app y su Facebook de forma obsesiva, si crees que te estas arrastrando,  si tienes la sensación de que estás dando mucho más de lo que recibes, si pese a todo tu empeño las palabras no fluyen… es muy probable que tu relación esta terminada, seguramente ella este ya pensando en como dejarte.



Si ya no te escribe, no le gustas. S si cada vez hace menos planes contigo, no le gustas. Si cancela muchas de las citas, no le gustas. Si tu nunca le dices “no”, no le gustas. Si percibe que actúas de forma reactiva, le estas empezando a desagradar. Si pierdes protagonismo y tu humor, no habrá momentos de pasión Y si la amas por miedo a perderla seguramente ya la has perdido.

Este tipo de rupturas son tremendamente dolorosas y aun son más difíciles de gestionar si te esta dando un “caramelito" por cada diez sin sabores, ese cariño puntual es solo un espejismo en el desierto del afecto. Como le incomodaban tus preguntas ya has dejado de hacerlas, simplemente te has convertido en un tipo reactivo-torpe y sin medios para improvisar, lo que te aun te aleja aun más de ella.

Si le gustaste es porque un día demostraste personalidad, criterio y espontaneidad, si quedó contigo es porque sabia que era un reto conquistarte, pero si solo fuiste un parche o un capricho para arreglar algo que ella misma por si sola no puedo gestionar, ya has cumplido su propósito, simplemente déjate marchar. Quizá ya sabes todo esto, pero no se trata de ver la realidad distorsionarla y ver tu tiempo pasar, no se trata de compadecerse, lamentarse y adoptar el papel de víctima, se trata de seguir viendo dignamente y con cierta normalidad.

jueves, 3 de julio de 2014

¿Qué hay detrás de un triatleta?

Esta es mi entrada para "EPO for my mind" del mes de Julio.
The English version is in the bottom.

Articulo en Sport Training.

¿Por qué todo el mundo quiere ser triatleta? ¿Por qué cientos de miles de personas de diferentes lugares, edades, sexos, clases sociales… rompen a diario la ley del mínimo esfuerzo para preparar y terminar retos que al resto de la humanidad le parecen ridículamente duros? ¿Por qué gastamos grandes cantidades de tiempo, dinero y energía en una sola actividad de ocio?

Un life coach no se puede preguntar simplemente el por qué de las cosas y obligatoriamente tiene que hacerse la poderosa pregunta… ¿para qué? ¿Para qué lo hacemos? Un para qué nunca puede tener una respuesta simple y superficial y siempre activa razonamientos más complejos. ¿Para qué entrenas, compites y terminas un Ironman? 

Un entrenador de la vieja escuela no se pregunta ni por qué su cliente entrena ni para qué su pupilo quiere competir en triatlón, simplemente optimiza todo su potencial físico para llevarlo en las mejores condiciones al bocinazo de salida. Sin embargo, actualmente, son personas de 40 años con antecedentes de vida sedentaria y con poca o ninguna experiencia activa en el deporte los que más contratan programas personalizados de entrenamiento, algo poco habitual en el pasado. ¿Qué hay detrás de estas personas? ¿Quieren llenar vacíos que nunca se han llenado? ¿Quizá gestionar sus emociones de una forma diferente? ¿Tal vez desean sentirse como super hombres y ser admirados? ¿Hay problemas laborales, rupturas difíciles o una vida monótona en el transfundo de los nuevos deportistas? ¿Para qué publican sus proezas entrenando, sus ultimas adquisiciones de material, las fotos que mi amigo Santa les hace en las carreras o sus propias crónicas de la última competición en sus Facebook? ¿Para qué lo hacen? ¿Para que tanto esfuerzo? ¿Es para lucir un bonito físico? ¿Es simplemente por la gran sensación que se siente tras finalizar con éxito una competición? ¿Para qué muchos de estos deportistas amateurs “chupan rueda” o se dopan? El que quiera vender deporte y especialmente “el nuevo deporte”, debe hacerse y saber dar respuesta a estas preguntas. 

Me atrevo a decir que la gran mayoría de futuros consumidores y consumidoras de triatlón hoy tienen cerca de 30 años y quizá hábitos poco saludable. Posiblemente son grandes aficionados al fútbol o cualquier otro “deporte Show” pero sin apenas practicarlo y casi con toda seguridad sin ningún contacto con la competición y mucho menos en deportes individuales pero son personas con muchas ganas de sentirse un Ramos, un Müller o un Neymar. A nuestra generación nos sabe a poco simplemente ir a los estadios a participar en los éxitos de otros y queremos ser los protagonista y que los nuestros vean nuestros triunfos y la forma más sencilla de sentirse una estrella del deporte, aunque sea solo por un día, es participar y terminar un Ironman.


English version
What's behind a triathlete?
Why does everyone wants to be a triathlete? Why do hundreds and thousands of people from different places, ages, sexes, social classes break the law daily of least effort to prepare and complete challenges that the rest of humanity see to be ridiculously hard? Why do we spend large amounts of time, money and energy in just one leisure activity?

A life coach can not just ask why things happen and should ask themselves the powerful question...for what purpose? For what purpose do we do this? What reason do you have for never giving yourself a simple answer, what purpose does the complex answer serve? What is the reason that you train, race and finish an Ironman?

An old school coach does not wonder why their client trains or why their pupil wants to compete in a triathlon, they help you optimize your physical potential to bring you in the best conditions to the starting gun. However, at present, there are people in their 40´s, with a history of a sedentary life and no active sports experience who are most likely to hire personal trainers, which was unusual in the past. What's behind these people? Do they want to fill gaps that have never been filled? Maybe manage their emotions in a different way? Maybe they want to feel like supermen and women and be admired? Are there labor problems, difficult breakups or a humdrum life in the new athletes past? Why do they publish their coaching prowess, their latest acquisitions of material, the photos that my friend Santa takes of them in their races or the last competition posted all over their Facebook? What reason do they do this? Why do they put in so much effort to compete in a triathlon? Is it to show off a nice body? Is it just for the great feeling after successful completion? How many of these amateur athletes draft or dope? Whoever wants to sell sport, especially the "new sport”, should be able to answer these questions.


I guess that the vast majority of future triathlon consumers now are in their 30´s with unhealthy habits. They are possibly big soccer fans and watch all of the "sport shows” but almost certainly are not actively involved in sport competitions or individual sports but people are eager to feel like a Ramos, Müller or Neymar. For our generation, it is not enough just to go to the stadium to participate in the successes of others, we want to show our triumphs and the easiest way to be a sports star, even if it is just for one day, is to finish an Ironman.