miércoles, 15 de enero de 2014

Creatividad y aburrimiento no son buenos amigos.

Ninguna conversación estúpida o frase absurda y genérica debe arruinar un buen momento de silencio. Igual que es mejor estar callado a decir cualquier bobada, tampoco es tan malo tener un par de días sin actualizaciones en tu Factbook; para escribir que te has quedado sin sal, quejarte de lo malo que es el conductor del autobús o las rebajas; quizá mas vale simplemente no publicar nada. Si quieres desconcentar, perturbar, herir, transmitir culpabilidad etc… a tu ex pareja o amigo puede que lo consigas más fácilmente sin publicar nada que escribiendo alguna de esas “perlas” que todos hemos leído en algunos de nuestros contactos.

Un principio fundamental de la creatividad es que tenga un fin práctico, que lo original implique mejora, que lo nuevo sea funcional.

La obligación de hacer algo no mantiene una buena relación con obtener excelentes resultados si no hay una por medio una necesidad practica que cubrir. Si bien es cierto que la necesidad agudiza el ingenio, la actividad por aburrimiento no encadena ingenio con lógica.

Una persona que se aburre en su puesto de trabajo tiene un gran potencial de conducir su creatividad hacia lo absurdo y sin sentido. Un problema activa la búsqueda de una solución, pero el aburrimiento activa la busqueda simplemente del cambio. Tener que hacer algo por necesidad, por romper la inactividad cuando las cosas funcionan corre el  riesgo de romper la funcionalidad. Quizá es preferible buscar un problema y encontrarle la solución o simplemente no hacer nada a tener que hacer algo de cualquier manera por romper la inactividad anteriormente citada ¿Cuántas profesionales, desde altos ejecutivos, mandos intermedios, operarios y como no, políticos, rompen el equilibrio porque tienen que demostrar su presencia y ego; porque tienen que justificar un salario y un estatus.

Colegas coachs, quizá es mejor no actualizar el Facebook de tu necio de life coaching, que poner la frase “casposa” de auto-ayuda de los viernes. Querido ministro, si algo tiene contenta a la gran mayoría de votantes no haga reformas retrogradas, queridos encargados y directores; si tienen que romper su inactividad que justifiquen sus salarios, busquen mejor un plan de desarrollo que perturbar la buena dinámica del grupo y si no lo encuentras; mejor vuélvanse a por otro café de los de 45 minutos.

Puestos a crear por romper la falta de actividad, mejor buscar o inventar una necesidad y encontrar la manera satisfacerla.¿Por qué no adjuntar la variable desarrollo y ser creativos para evolucionar, lograr y perdurar y no solo para reparar?

En definitiva, La idea creativa siempre debe satisfacer lo útil y practico y la virtud de la creatividad mejor para buscar la excelencia que para hacer perpetua la mediocridad.

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